Las pinturas bengalíes muestra repetidamente a la diosa en posición con el dios Shiva. El hombre esta tendido de espaldas y la mujer se arrodilla sobre él mientras le ayuda a que la penetre. Ella puede inclinarse hacia delante como Shakti, rozando con sus pechos el pecho de su dios y mirandole largamente el fondo de sus ojos.
Esta posición era tambien favorita de los griegos y de los romanos, incluida Mesalina, y es atrayente por diversos motivos en la sexualidad madura. Ayuda al hombre a aguantar durante más largo tiempo y da a la mujer más control y mayor libertad para encontrar su propio ritmo y aire. El placer se acrecienta si ella se pone un cojín bajo los muslos. La mujer puede elegir entre un movimiento de vaivén o uno circular o una combinación de ambos. Si ella flexiona hacia atrás sus músculos antes de moverse, el roce del clítoris será más intenso. Es una posición muy descansada para el hombre, dado que ella puede hacer la mayor parte del trabajo antes de caer entre sus brazos.
Tomado del libro: "Método Oriental del amor" de Kamala Devi. Ediciones ATI; Barcelona (1977)
En esa entrada hemos recibido el comentario de una persona que se identificaba como Anónimo en el que hacia una calificación despectiva al material aquí publicado.
ResponderEliminarEs evidente que no la vamos a publicar, pero no es un tema de censura de opiniones, es sencillamente que este espacio tiene activado un control para que no puedan acceder menores por un motivo. Las imágenes de las asanas tántricas son explícitas. Es un material que puede ser de utilidad desde un punto de vista de especialización en sexología clínica porque este tipo de posturas pueden ser muy útiles en casos de disfunciones sexuales. No se trata por lo tanto de decir que son meramente contenidos eróticos o pornográficos, son material de trabajo de una especialidad más del campo de la Psicología Ciéntifica, entender el contexto del tantrismo en cuanto a la sexualidad es una herramienta que ha de ser manejada con cuidado y profesionalidad. No tendría sentido de otra forma porque un sexólogo no pretende enseñar a la gente a mantener relaciones sexuales, lo que trata son disfunciones y problemas que mirados desde una perspectiva de terapia psicológica son bastante sencillos de tratar. Lo que nos sucede es que el sexo y la sexualidad tienen un componente tan cargado culturalmente que a veces no entendemos cuanto nos lastra en algo que en realidad es bastante fácil de entender desde el punto de vista de la psicología. Comparado con la esquizofrenia la mayor parte de los problemas de disfunciones sexuales tienen bastante buen pronostico.