martes, 21 de septiembre de 2010

Sexo tántrico (Sexo Oral, Auparishtaka)

Imagen que representa a el dios Shiva y su "Shakti" Párvati unidos en un mismo cuerpo masculino y femenino a la vez. Es importante resaltar que este tipo de representación para la mentalidad de la India lo que hace es manifestar el gran poder de esa divinidad.


Por lo general tenemos muchos prejuicios culturales sobre la practica del sexo oral, en parte esto es de esta forma porque se supone que al no conllevar la posibilidad de concebir es una energía y unos fluidos corporales que se desperdician para nada.
Ya hace tiempo que esta demostrado desde el punto de estudio de la sexología científica que la practica del sexo oral en relaciones consentidas puede ser muy útil para aliviar trastornos sexuales como el vaginismo, la disfunción eréctil o la eyaculación precoz.
Un tratamiento de este tipo debe hacerse desde el punto de vista profesional con seriedad y cuidado ya que evidentemente los occidentales solemos asociar el sexo oral con la prostitución.
Si desde un punto de vista profesional como sexólogos adoptamos un sentido tántrico para ir librando de inhibiciones y prejuicios sobre el sexo a la gente que tratamos tambien podemos hacer uso de este si conviene para un tratamiento. Lo que aquí os ponemos es una breve referencia sobre el sexo oral o "Auparishtaka" que os puede ser útil para contextualizar un tanto el tema. 



El sexo oral se caracteriza por despertar mucho más rápido el kundalini ya que interrumpe la secuencia lógica de procreación que se encuentra implícita en una relación sexual.
La importancia del sexo oral proviene dada desde que una de las primeras actividades que hace el ser humano cuando nace es succionar el pecho de la madre para alimentarse. Así, se hace la relación inconsciente que el acto de chupar con la boca es tranquilizador, de ahí que luego se chupe el dedo, se coma tierra, papel, y el borrador del lápiz en la escuela.
La satisfacción oral se mantiene a lo largo de la vida y así tenemos la gente que come chicle, gente que fuma, gente que se come las uñas, etcétera.
Dentro de la tradición del Tantra, el sexo oral se ve como un yoga o una unión de los opuestos, pues lo que está arriba se une con lo que está abajo. Esto provoca un equilibrio entre las fuerzas energéticas que llevamos dentro y que nos comunican con la naturaleza. El sello tántrico "Cómo es arriba es abajo", se refiere a esto y se encuentra en los himnos sagrados, y en todos los rituales antiguos.
La unión sexual genital se considera un acto esotérico que implica la perpetuación de la raza. Por su parte, el Vajroli Mudra, el fellatio (sexo oral de mujer a hombre) y el cunnilingus (sexo oral de hombre a mujer) por el contrario buscan la creación de un "hijo mental", que puede ser desde una idea hasta un concepto, y que hace al ser humano más completo.
En el cunnilingus, la lengua se convierte en el falo, y en el fellatio es la boca de la mujer la que se convierte en vagina. Estas nuevas significaciones provocan una especie de estallido mental, pues la lengua es sumamente sensible y amplifica las sensaciones.
Por otro lado, la relación entre la boca y la vagina es más que simple parecido. Cuando nos encontramos en un momento de suma tensión la boca se seca, y a las mujeres no sólo se les seca la boca sino que también la vagina o el yoni. Por el contrario, si estamos excitados, la boca genera mucha saliva, de la misma forma si la mujer se encuentra excitada su vagina se humedece.
Ahora, tradicionalmente en nuestra cultura occidental, la relación sexual oral ha sido prohibida, rodeada de tabúes y cargada con nociones de perversión o suciedad, y no hay nada más lejano a la perspectiva tántrica. En nuestras sociedades, se analogiza las excreciones corporales o productos de desecho de nuestro cuerpo con los fluidos sexuales que son ricos en nutrientes. Además, para el Tantra es fundamental que haya una completa higiene en ambos participantes de la relación, tanto en el nivel corporal, como bucal, genital y en sus manos, pues así se previenen enfermedades.
La mujer o Shakti y el hombre o Shakta se recuestan sobre el lado derecho. La cabeza de cada uno se debe oponer a la zona genital del otro. Shakta debe deslizar su mano derecha por debajo de los muslos de la mujer, y reposar su cabeza entre los muslos de ella. Luego, él debe humedecer con su saliva sus dedos índice y pulgar derechos y sellar firmemente el ano de su compañera con el índice, al mismo tiempo que introduce su dedo pulgar en el yoni o vagina. Entonces, él posa su boca sobre el yoni, y su lengua empieza a actuar sobre el clítoris.
Por su parte, Shakti encapsula con su boca el lingam (pene) de su compañero, cerrando el orificio de la punta con la lengua y presionando el ano con el tercer dedo de su mano derecha. Los otros dedos deben acariciar el perineo y el escroto.
Esta postura llamada Kakisana o Postura de la Corona, induce un orgasmo suave y permite que la consciencia del dios y la diosa se congelen en una inmovilidad trascendente. (se esta refiriendo a la postura del 69)


Conviene recalcar que cuando en lo anteriormente escrito que hemos compartido aquí, se están refiriendo a "Shakta", no es el nombre que en sánscrito se da al varon. Para que se os quede claro ir al articulo sobre la palabra: Shakti en Wikipedia que seguramente os dejara sorprendidos. Para entender bien la concepción tántrica de lo que es masculino y lo que es femenino es conveniente tener en cuenta que "Shakti" no es la esposa sino la energia de un dios, que en el caso que nos ocupa vale para un hombre, en forma femenina. Es por eso que se trata de hacer de la practica del sexo en una pareja de amantes un acto de culto religioso. Si la pareja sexual femenina con la que esta un hombre se le da el nombre y las atribuciones de "Shakti" se la esta dotando de una fuerza divina. Cuando a la "Shakti" se le practica la "Auparishataka" el hombre se convierte en un "Shakta" la energía sexual de la mujer en forma masculina. Es por ese motivo que esta especie de juego de rol erótico puede ser muy conveniente en determinadas ocasiones.


Imagen en la que aparecen representadas la Tridevi (Lakshmi, Parvati y Sarasuati) o conjunto de las tres Shaktis de la Trimurti (Vhisnu, Shiva y Bhrama) o Trinidad de los tres dioses principales del hinduismo. Un concepto religioso en el hinduismo puede tener una aplicación muy metafísica y elaborada y al mismo tiempo una practica de uso corriente que nos puede resultar paradójica por la gran variedad cultural del subcontinente. 
El que una entrada sobre sexo oral tántrico tenga que recurrir para que pueda ser entendida a estas tan respetables diosas que suscitan una veneración comparable a la que los católicos sienten por la Trinidad sin perder un ápice de sacralidad es una de las cosas que más fascinación nos pueden causas del tantrismo en particular y las religiones generadas en el Indostán en general.
Es de resaltar que nos aparecen con un solo tronco de mujer con múltiples brazos y tres cabezas siendo esta la forma iconográfica del hinduismo de representar su gran poder.

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